sábado, 6 de febrero de 2010

M


Estimado Metro,
Hace ya casi diez años que nos conocimos por primera vez y debo confesar que aún sigo impresionado por tu envergadura. Te has hecho con el mundo entero y eres sin duda alguna mi medio de transporte favorito. Te he ido a visitar más de una decena de veces y hemos quedado en bastantes ciudades a lo largo del mundo. Imagino que volveré a verte este año En Moscú, Dublín, Lisboa y Oporto, que sé que también llegas a esos lugares.
Nunca olvidaré el día en que te conocí. Fue en París y yo estaba comprando el billete en la estación de la Bastilla. Desde ese día me fascinaste. Luego seguimos quedando en Barcelona, Madrid, Londres. Verte en Londres fue una de las cosas que más recuerdos me trae. Dominabas mi idioma predilecto y tu tamaño me hizo confiar en ti sin dudar un segundo. En la ciudad donde más hemos quedado es Madrid, supongo que por la cercanía.
Disfruto mucho esperándote en cada estación mientras voy viendo a todas las personas que te aprecian esperando tu llegada. Todas esas caras fijas en libros, periódicos y revistas. Muchos como yo se dedican a mirar al vacío, o simplemente ver el tipo de seguidores que te son fieles. Trato de imaginarme sus vidas y las historias que esconden tras sus miradas y sus ropas. Me pregunto por qué andan siempre con tanta prisa. Intentando entrar en el vagón con tantas ansias aunque ya esté lleno del todo y no quepa un alma.
Te vi en Budapest, Nueva York, Berlín, Múnich, Milán, Nápoles, Roma, Turín, VienaAmsterdam... Te han llamado Metro, Tube, Underground, Subway, U-Bahn, pero siempre eras tú, inmortal y penetrable. Una de las cosas que más admiro en ti es tu puntualidad. Cueste lo que cueste llegas a tu hora, sin un solo minuto de retraso, cerrando tus puertas tras ese sonido tan característico.
Con el tiempo has creado tus normas. Para llegar a ti hay que detenerse al lado derecho de la escalera o adelantar por la izquierda si se tiene mucha prisa. No pasa nada si alguien se equivoca de parada, con bajarse en la siguiente y dar la vuelta es suficiente. Normalmente cada estación está bautizada con un nombre, cada línea con un número y a su vez un color. Eres un perfeccionista nato que ha nacido para hacer la vida más fácil a la humanidad.
Todo un placer coincidir en esta vida, estimado M.

No hay comentarios:

EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...

Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad




"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE