miércoles, 26 de enero de 2011

DENYING

Llegar a los 27 años y no saber sobre qué escribir se me convierte en algo extraño y contraproducente. Creí que acercándome a los 30 tendría más inquietudes, pero creo que las situaciones de un hombre adulto van en detrimento con los años. Ciertamente poco ha cambiado dentro de esta cabeza que sigue comiéndose el coco cada vez más, a la vez que se despreocupa por otras tantas cosas y se deja llevar por la dirección del viento haciendo a veces de veleta y dejando pasar o cogiendo impulso con la brisa.
Los seres humanos somos unos cretinos. Tenemos nuestra ética muy aprendida, interiorizada y preparada para lanzarla vocalmente cuando alguien no la respeta. Sin embargo, cuando se trata de nosotros mismos, nos permitimos el lujo de romper cada una de sus reglas sin buscarle sentido propio y como nosotros las creamos, nosotros las rompemos. Nos creemos muy fieles a los dogmas, muy correctos y luego nos corrompemos a la primera de cambio. 
Cierto que nadie puede controlar del todo cuerpo, alma y corazón, pero si tampoco se opone resistencia es cuando vienen los remordimientos. De todos modos el ser humano no es tan racional como pretende y es capaz de evadir sentimientos con facilidad, y la culpa es uno de ellos. Acabamos tristemente haciendo todo lo que dijimos que nunca haríamos. Volvemos a relaciones que nos destrozaron alegando excusas que no se mantienen y que nadie realmente cree, pero todos comentan. Regresamos a ese lugar del dolor mientras nadamos en las aguas de la amargura de forma gratuita.
El cuerpo dice sí, la mente dice no, el corazón no sabe qué decir, pero finalmente todo se desmorona y acaba mal, con la peor de las opciones plantada en la cara. Daños colaterales que no tenían que crearse necesariamente. Finalmente nadie se siente mal, el tiempo guarda todos los secretos y las decisiones que quizá nunca vuelvan a resurgir. Todo queda en nada, en un puñado de recuerdos en la memoria que se avivan levemente con el paso del tiempo.

No hay comentarios:

EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...

Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad




"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE