jueves, 25 de diciembre de 2008

WHERE ARE YOU CHRISTMAS? WHY CAN'T I FIND YOU?

Las navidades me ponen triste. Durante tres semanas parece como si mi mundo se vistiera de melancolía y recuerdos. Intento buscar ilusión en un árbol de navidad imaginario que ya hace años que no se hace porque me pesa encontrar ganas de hacerlo. Intento buscar ilusión en los regalos que ya no se hacen en reyes porque las tradiciones se rompieron una vez en el tiempo. Intento buscar ilusión en los planes que tengo pensados para nochebuena y al final no hago, porque estoy triste y prefiero quedarme en casa comiéndome la cabeza una vez más. Intento buscar ilusión en la corbata nueva, en las ramblas pasadas de moda, en las caras de los demás, en el espíritu navideño que se respira en las calles, pero que a mi me asfixia. Intento buscar ilusión en los años que no volverán, en las familias unidas a las que envidio, en los amigos de verdad que creo que he tenido alguna vez. Intento buscar ilusión donde no la hay, simplemente porque no existe o ya murió...al final todo muere. Me obligo a cumplir mínimamente con las cuatro cosas que se supone que debo hacer, pero que no me apetecen lo más mínimo. Cada año se sepulta un poco más mi espíritu navideño. Ni siquiera comí uvas para despedir el 2007 porque tuve que trabajar y el destino quiso que me tocase una llamada de alguien que tampoco comía uvas a las 12 de la noche. Poco a poco se desvanece y me pongo más y más triste. Me planteo llorar, pero sé que no funcionará. Si empiezo a llorar...probablemente las lágrimas no dejarían de caer jamás. Así que opto por buscar mi mejor careta y meterme en ese papel que tan bien se me da. Vuelvo a llevarme un año más el oscar al mejor actor de reparto por la película "La navidad es bella", y aún así me parece la peor actuación de la vida, pero como todo el mundo se la cree...pues yo me quedo tranquilo. Al final me miro y me he convertido en el nuevo Scrooge de Charles Dickens, que espera a que los espíritus del pasado, presente y futuro vengan a enseñarme dónde se esconde mi ilusión navideña. Esa que igual una vez tuve, pero que alguien me arrebató 5 años atrás. So lonely inside, so busy out there, and all I wanted was somebody who cares.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No entiendo por qué pretenden que quiera la Navidad.
Podría decir lo más lógico pero aburrido a nuestros oídos.
Desde pequeño, alguien me enseñó a que estas fechas era la forma más efectiva de reclusión que hubiera podido existir. Tras los manteles de familia desgarrada, no acercaba a jugar con nadie a mi alrededor. Simplemente, todo el mundo se iba a la otra parte del planeta, yo en cambio, me quedaba,…me quedaba a las citas con la pared de mi habitación, pintaba libros releídos, jugaba al ajedrez con mi compañía, jugaba con ilusión a que llegaba el colegio para tal vez ver un efímero valor de gente.
La Navidad llevó un castigo de dos semanas a mi niñez. La dulce Navidad me acecha cuando pretendo olvidarla. La queridísima Navidad pone en mis sentimientos todo aquello de lo que huyo el día a día. Ese aire de somnolencia, esa triste nostalgia que nos recuerda la amplitud con la que solíamos sonreír… La niñez me llevó a paseo hasta el hoy con la exactamente misma sensación de Navidad.
Un día puedes recordar lo que tuviste y perdiste, puedes hacer una manifestación tan larga con el “Ojalá” que llevamos en nuestra mente, pero nunca un sentimiento es tan saboreado, engullido y re-glutado como en estas fechas.
Será que cuando sales a la calle, las luces te recuerdan a ese amor, será que si vas a una tienda pensarás que tal vez te hubieran ido las cosas algo mejor… será que cuando le compras un regalo a tu madre te quejas del por qué del hambre en el mundo… pero sales a la calle y ves ojos acristalados, saludos innecesarios.. y entre ellos, bien escondido, tu pasado.
El pasado es presente y sin duda, siempre vuelve a casa por navidad.
La Navidad me incita a cambiar de aires, a intentar ignorarla, o posiblemente a darle un susto de muerte al darse cuenta que la he logrado esquivar. Pero me doy cuenta que no puedo, incluso las uvas se materializan solas en recuerdos que quisiste, hechos que pides, ilusión más que perdida.
Aún así, agradezco el “alcohol”, al menos hoy me puedo reír de todo cuando quiero y no debo. No evito recordar a los que vendieron su estancia en esta tierra, no evito sonreír por las personas que ocuparon conmigo restos de vida, no evito sentirme estúpido en un ambiente frío, falso y frecuentemente cansino.
¿Así que para qué mentirnos? Nos damos regalos para sentirnos menos malhumorados. Yo no quiero que la espina del día a día se convierta en un rosal persistente. Siempre he odiado la tragedia, y parece ser que de algún modo aparece en cada rincón de la calle.
¿Por qué no pude vocalizar lo que mi mente decía? ¿Por qué no me miró cuando se dio cuenta que estaba todo perdido? ¿ Por qué evité un saludo? ¿Por qué volví a suspender? ¿Por qué me materialicé en un iceberg? ¿ Por qué no me dejó explicar? ¿Por qué volví a caer en esto? ¿ Por qué soy tan tonto? ¿Por qué no puedo querer? ¿Por qué mi vida integra variables escondidas? ¿ Por qué no puedo creer? ¿Por qué mi mente no me deja al menos llamarle?
Porque es Navidad,… de nuevo.

Pero ayer y hoy todo cambia. Soy otro. No tengo nada ni nadie viviendo en mis bolsillos. Empiezo a pensar que soy lo que me queda de vida. Empiezo a valorar mis piernas por las que puedo mover algo más que dedos. Empiezo a respirar oxígeno puro. Empiezo a valorar el ser más persona. Empiezo a sentirme feliz de mis nuevas metas. Empiezo a saborear mi vida…pero para empezar, no hay ni un solo instante en que no note el vacío de aquellos que en algún instante se fueron.

Anónimo dijo...

Para mi La Navidad, al contrario que para la mayoría de la gente, es una fecha en la que, sin poder evitarlo, me siento cada vez mas sola...sentimiento que no se apaga por mas gente que te rodee, es un sentir de la soledad diferente.

EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...

Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad




"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE