lunes, 7 de febrero de 2011

A-MAN...

Una habitación cerrada con llave por dentro, un ventanal con las persianas bajadas, paredes en tonos pastel y un plafón con su luz apagada. Un armario haciendo juego con la mesa de noche y el escritorio. Cortinas de croché hechas a mano y una alfombra llena de polvo que lleva semanas ahí. En el centro de la habitación una cama de matrimonio desecha desde la noche anterior y sobre ella se encuentra aquel hombre.
El hombre de la camiseta a rayas y los vaqueros rotos, comiéndose la cabeza una vez más. Piensa en todas esas personas que han pasado por su vida, las huellas que han dejado en ella y las marcas imborrables de su corazón. Diferentes nacionalidades y amando distintas ciudades a través de sus caricias. Piensa que ya no sabe qué hacer o decir para que las cosas salgan bien...vayan bien. Se martiriza por no poder ser lo que quiere ser...y comete errores a cada paso que da, haciendo que su camino sea más pedregoso. 
El hombre vuelve al pasado constantemente y de ahí vienen sus problemas al dormir. No sabe qué ha hecho bien de todas las decisiones que ha tomado. Tan solo espera ser de quien le haga totalmente feliz, que aún parece que no llega. Extraños se cruzan y aparecen, miradas confusas que no dan indirectas claras. Nuevas personas con caras bonitas, con palabras bonitas que no dicen nada. Ya se ha vuelto un desconfiado y dejó de creer en nada. Ni siquiera confía en las sonrisas o en un puñado de palabras sinceras. El viento arrastra con todo, incluso con las verdades más pesadas. 
Aquel hombre se replantea la vida y prefiere quedarse solo. Tener una carrera de vida en solitario durante una temporada para ser capaz de mirarse a sí mismo y no encontrarse tan vacío. Un hombre que ya se ha cansado de encerrarse en la habitación para amasar el aire mientras mueren sus neuronas de tanto pensar. Ya incluso lo ven vagar por las calles con aquella mirada perdida que no dice nada...solamente muestra el dolor del tiempo, de los años, de las historias, de los corazones rotos, de las mentiras, de las heridas, de las cicatrices que aún duelen...
El hombre sigue sin volver hacia atrás, sigue sin avanzar, sin presente, sin nada, con las manos vacías. Yo desde aquí le animo a continuar, a hacer lo que quiera hacer, a ser lo que quiera ser. Le aconsejo que no de abrazos si no los siente, que no de besos si no lo quiere y que olvide aquel camino pedregoso que sigue desde hace años. Que la luz aunque ciegue al final se convierte en guía y la oscuridad no es el final, sino el principio de algo nuevo, una bella oportunidad a tomar...

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EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...

Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad




"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE