domingo, 8 de noviembre de 2009

UNKNOWN

Hoy me siento pequeño, absurdo, insignificante. Aún menos importante que un ácaro invisible. Me siento como aquel actor al que le prometieron el papel principal y al final ni siquiera participó en la película. Soy el silencio que hay entre canción y canción de un disco. Tan breve que nadie quiere escucharlo aunque dure dos segundos.
Soy el aullido de un lobo que se ha caído al fondo de un barranco. Una voz que se desvanece con la brisa y unas palabras que el viento deja sin pronunciar. Soy el vacío, el eco, la nada. No soy cara, ni persona, ni alma. Soy la sombra de una sombra vista desde el cielo. Un punto para el universo, una molestia para la humanidad.
Hoy soy tan enano que hasta las hormigas se ríen de mí al pasar. "Eres diminuto" me dicen al cruzarse en mi camino. Yo agacho la cabeza aún más y la nariz me llega al suelo. Al caminar todos me empujan sin siquiera mirarme y me voy encogiendo aún más.
Hoy no me arrastro, sino que repto por el suelo lamiendo cada loseta con sabor a alquitrán rancio empedrado. No me siento mal, me siento peor. Me siento triste, ilógico. Solo por dentro, ocupado por fuera. Hoy digo que la vida cuanto más vacía pesa más. Aunque siempre haga cientos de cosas hoy no hago nada y me siento estúpido.
Hoy es domingo, sinónimo de aburrimiento, de estar en casa, de no hacer nada. Hoy soy cuatro paredes, soy un techo agrietado y un cuadro torcido. Soy un aparato sin pilas, un paraguas agujereado, un plato sin sal. Me siento desabrido, agrio, áspero. Complejo porque hago que lo simple se complique más, porque soy muy psicológico, porque soy una cabeza pensante.
Hoy no respondo al teléfono, no abro la puerta, no voy al timbre. Me siento deshidratado de aire, asfixiado de agua, ardiendo en las llamas, en la hoguera de las brujas, pero no por malo, sino por tonto. Peco de lengua, de palabras, de actos, de mala persona. Peco de protagonismo, de superioridad, de burla.
Hoy me como mis palabras, las digiero y las vomito. Me las aprendo y no las repito, ni hoy ni jamás. Cuento hasta un billón sin parar, pero me quedo en el cinco, porque no puedo avanzar más. Soy demasiado débil, como un pelele de paja que se lleva un estornudo hacia el sol. Estoy oscuro, apagado y sin conexión. Hoy no soy yo...soy la pena, la nostalgia, el dolor, la tristeza. Hoy soy más cabrón que nunca, pero los cabrones también lloran.

No hay comentarios:

EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...

Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad




"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE