Y ES EL AMOR....

Y el amor aparece entrando por una ventana entreabierta o una puerta mal cerrada y te dice a la cara que va a sacudir tu mundo de formas inimaginables. Y te muestra que los besos son de colores, los abrazos de olores. Te enseña a volar sin alas, a lidiar con mariposas en el vientre, a pelear por buscar horas a destajo. El amor te marca, te rompe y te recompone, te da fuerzas para despertar por las mañanas, para dejarte llevar por las noches, para soñar sobre lo imposible. El amor te eleva hasta el infinito, te hace desaparecer a otros mundos y te susurra al oído las frases más bonitas que nadie se atrevió a escribir. El amor te expresa cualquier sensación con miradas, te regala sonrisas en cualquier espacio y tiempo y los relojes no tienen control sobre las personas. El amor no se espera, ni se compra, ni se intercambia. No es rojo, violeta ni fucsia, es de un arco-iris de emociones que erizan la piel hasta morir de felicidad. El amor no es un regalo de gran lazo, un chocolate en invierno o un cuerpo bronceado en verano. El amor te lleva de la mano, te cierra los ojos en silencio y te roza hasta el éxtasis más eterno. El amor te da sorpresas, te brinca caídas libres con finales felices y te tatúa una carcajada en medio de la cara. El amor te madura, te crece, te reproduce y te revive. El amor lo puede todo porque todos hablamos de él y no hay nada más vivo que aquello que recordamos y memorizamos con palabras. El amor vive en cada verso, duerme en cada pluma y descansa en cada poesía porque amar es gratis, está al alcance de todos y es lo más sano que existe en este planeta. Amar es el oxígeno que se crea cada vez que parpadeamos, es la plenitud que nos llena el pecho cuando respiramos y viene en forma de seres de igual o distinto sexo con uno solo o varios propósitos. El amor es lo que el destino envía en nuestra captura, es lo que está escrito en las estrellas y no se sabe hasta que llega, es lo que hemos vivido todos al menos una vez en la vida. El amor hace libre al preso, hace bueno al diablo y cura al enfermo. El amor, que nos persigue en cada palabra que lanzamos al viento...también sale de las manos del que lo siente aunque no lo oye, sale de la voz del que lo escucha aunque no lo vea, del que lo toca aunque no lo quiera. El amor, que todo lo llena y todo lo llena y todo lo magnifica, el que hace que un grano sea montaña y una montaña cordillera. El amor, que duerme al otro lado de cada cama, en el otro final de cualquier teléfono, en el buzón de una nueva dirección. Es el amor lo que nos permite continuar, seguir creyendo, volver a vivir. El amor, que todo lo sobrepasa, incluso la muerte, que vuelve cuando nos hayamos ido y que nos persigue en cualquier dimensión atemporal. El amor...del que todo el mundo ha escrito algo, pero nunca nadie ha podido definir jamás. Es él, o ella, o ello y no nadie más...el que hace girar el mundo. La gravedad....de momento...tendrá que esperar.