martes, 8 de octubre de 2013

ESTE LUGAR QUE TODOS LLAMAN MADRID

Sin más que un puñado de ropa dentro de una maleta en mi mano izquierda y mi gato balanceándose en la derecha aterricé en una ciudad llamada Madrid. Abandoné prácticamente todo por lograr algo que ansiaba desde hace mucho; algo llamado "oportunidad". Para muchos una locura, para mí una vía de escape. Siempre pensé que Madrid guardaría una salida para esos que son como yo, que van de verdades por delante, de sonrisas regaladas y de amistad grabada a fuego. Y aquí me encontré, en un hogar cerca de la línea de metro Circular, la que gira en ambos sentidos sin terminar nunca, la que no tiene principio ni fin...como el tatuaje que llevo en el cuello. La línea eterna e infinita, justo como mis sueños. 
A solamente un mes y varias semanas puedo decir que Madrid me ha enseñado muchas cosas que no creí que fuera capaz de hacer. Me enseñó a estar solo en todos los sentidos, a valerme por mí mismo más de lo que ya lo hacía y más importante aún, me enseñó a ser padre. Me obligó a cuidar de alguien 24 horas durante varias semanas, a preocuparme, a pasar miedo, terror, a no saber qué va a pasar, a tener un ojo dormido y el otro despierto...vigilante. Madrid me enseñó a poner frontera a una amistad ficticia que una vez creí real, me enseñó a que puedo sentirme como en casa aunque no sea mi casa. En Madrid aprendí a valorar el tiempo, a invertirlo, a aprovecharlo. 
Madrid trajo gente importante a mi vida, a mi casa, a mi existencia. Personas que me han enseñado que la soledad se termina con una llamada, con un mensaje, con un guiño, con un abrazo. Esta ciudad me ayudó a asentarme como profesor, a aprender de las miradas de los alumnos, a llevarlos por el camino más sencillo hacia el aprendizaje. Cuanto más se enriquecen ellos, en mejor profesional me conformo yo. Leganés fue mi ventana, mi escapatoria, mi ciudad a seguir. No podía ser en otro lugar para empezar, tenía que ser aquí, justo ese sitio en el que estuve no muchos años atrás vestido de negro y esperando durante horas por un concierto. Leganés me hace sacar lo mejor de mí, y eso me gusta. Me demostré una vez más que me crezco ante adversidades, que salgo del paso ante situaciones extrañas, complejas. ¿Mi arma? La naturalidad, la humanidad y la sinceridad. ¿Acaso hay algo más bonito que una persona que sea humana, cercana, directa? De esas que hacen que las cosas complicadas sean más fáciles si se saben explicar. Pues en eso me ha convertido esta capital.
A día de hoy, con una cortina por ventana, con un fantasma como compañero de convivencia, con números rojos en mi cuenta corriente, con un gato que depende de mí para recuperarse y con todo lo que tenía asegurado a un mar de distancia...puedo decir que estoy feliz, contento y realizado. Confieso que muchas cosas pueden mejorar y no han sido sencillas en absoluto, pero no puedo pedir más. Tengo gente que responde al teléfono cuando llamo, tengo un trabajo duro, pero reconfortante, tengo una sonrisa plasmada en mi cara y no necesito mucho más para poder seguir aquí, en este lugar que todos llaman Madrid.

No hay comentarios:

EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...

Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad




"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE