domingo, 23 de octubre de 2011

CARTAS EN PASADO MENOR (VOLUMEN VI)

29/12/2005


Soy por ti muy feliz…

Descansando, a cierta distancia, en el borde de la cama pensando en lo que estoy viviendo contigo, y me pregunto: ¿De qué trata esta historia? Me siento como un aprendiz de poeta que con versos pobres pero llenos de sentimiento, intenta conquistar el corazón de una gran dama. Demostrándole el tiempo, que después de tantas lágrimas que descendían copiosamente por mis mejillas, sus más puros pensamientos se iban a hacer realidad. Tiempo es quien te da la respuesta del por qué hay gente que todavía escribe algo a una gran persona amada, como lo hago yo en este momento.

Hasta poco después de habernos conocido no atinaba a comprender qué importancia tenían los detalles o momentos que pasábamos, de lo raro que era todo. Me fui con la sensación de que había dejado atrás a un gran amigo al que solo echaría de menos en mis momentos difíciles y una vez aquí me doy cuenta de que te necesitaba, de que me haces falta, que ya estoy acostumbrado a que estés a mi lado…conmigo. Quiero tenerte cerca pues necesito tu dosis de abrazos y besos. Te quiero. Estoy acostumbrado a escribir lo que siento en papel. Es una forma de demostrar que lo que digo es verdad y que a la larga el tiempo te dará la razón conmigo. Que hay cosas como el amor que no solo se demuestran hablando, pues las palabras se las lleva el viento. Prefiero que me beses sin decir nada, que yo lo haré así, aunque ya no me privaré de decirte una y otra vez lo que tengo escrito en papel: “te quiero y te echaré de menos si algún día estás lejos”. No hay ningún amanecer que no me despierte sin saber que te soñé.

Finalmente quiero que sepas la mayor de las razones por las cuales he sido tu amigo a todas horas: quiero que sepas que ya no solo eres ese gran amigo que un día apareció en mi vida y me dio algo de luz a mi existencia. Todo ha cambiado para bien; que ya no me encuentro con el pensamiento de que no tengo derecho a exigir que confíes ciegamente en mí, de que no tengo derecho a saberlo todo de ti, a robarte tu tiempo, a interferir en tus caminos, a hacerte chantaje con tu bondad, a exigir que llores reclinado en mis hombros a que corras siempre en dirección a mí.

Pendientes en cada momento del reloj somos conscientes del poco tiempo que nos queda para estar juntos. Apuro cada instante para recordar la imagen de esos ojitos marrones, de ese lunar tan precioso en tu cachete, del sabor de tus besos, del sentimiento cuando te acaricio, del olor de tu piel, del contacto de tus manos… de cómo me dices al oído “te echaré de menos”. Sigo tus pisadas porque a veces me pierdo, me pierdo en mil preguntas y al final siempre termino huyendo.

En cuanto a ti a mí qué decir. Son muchas las veces y ocasiones en las que te intenté decir “te quiero”. Veces en las que te buscaba con la mirada para que entendieras que me gustabas, que estaba a gusto de estar contigo en ese momento. Te doy las gracias por haberme leído en contadas ocasiones. Necesito decirte que aunque ayer me lastimaron algunas acciones, los recuerdos más frescos que guardo de ti son de los momentos buenos que no viene al caso enumerarlos porque tú sabes bien de lo que estoy hablando.

¿Qué es lo que espero y deseo? Lo que espero y sueño es que si un día necesitas un par de oídos busques los míos, si algún o cualquier dolor te aflige tengas el valor, sin miedo alguno, de encontrarme, aunque estés cansado, amargado o vacío. Llega a mí y dime que necesitas a alguien como yo. Lo que realmente quiero es que entiendas que no te quiero para mí, sino tan solo para ti. No te quiero con exclusividad, sino con ternura fraterna y sincera. Quiero que entiendas que si fuera necesario daría mi vida por ti…eso me susurra el corazón.

Cómo son las cosas, yo pensando que habría terminado de decirte todo lo que sentía y dispuesto a meterme en la camita me doy cuenta que todavía no te he dicho casi nada de lo que siento. Me levanto y me siento frente a un papel, y como un adolescente enamorado al que se le bloquean las neuronas por no encontrar las palabras adecuadas para expresar sus sentimientos, me pongo a dibujar corazoncitos en el margen de la hoja pensando en ese último beso de despedida de hoy.

Llevo rato leyendo tu carta y me impresiones y me emocionas. Hay poca gente que me haya escrito algo así y de entre todas sin dudar me quedo contigo. Ahora comprendo cómo me enamoré de ti y por qué me dices que de mayor vas a ser poeta. Por fin puedo utilizar esa palabra sin miedo a pensar que es otra cosa lo que siente mi corazón en estos momentos. No sé qué ves en mí, no sé si estaré a la altura de las circunstancias en esos momentos difíciles que sueles pasar, y no sé si podré cuidarte y mimarte como te mereces. No sé si seré un buen apoyo para tu tristeza. Yo tan solo pienso en darle calor a tu corazón, en preocuparme por ti en cada momento, en que estés siempre con esa sonrisa picarona que me vuelve loco, en abrigarte de amor, en demostrarte que lo que pasa entre los dos vale la pena vivirlo juntos. Que se me hace difícil imaginarte lejos, que me conozco y me sentiré vacío, la mitad, todo por no tenerte cerca. Que me veo alguna que otra noche: “Perdona si te estoy llamando en este momento, pero me hacía falta escuchar de nuevo aunque sea un instante tu respiración”.

Cuando estoy por caer yo sé que tu amor me volverá a socorrer. Eres mi poder, mi valor a través de lo peor, mi luz mi cielo azul…mi gran amor aún…por siempre tú. Que somos dos cuerpos jugando a amar, puntos en la oscuridad. Fuimos queriendo cada vez más y nada podía cambiar. El paso del tiempo nos quiso alejar y nuestro amor pudo más.

Bueno, ya conoces de sobra mi faceta sentimental y ya has comprobado que soy en ocasiones un paño de lágrimas. Desde hace un año hasta ahora, las cosas en lo que se refiere a lo sentimental me afectan bastante. Compréndeme cuando te digo que tengo los brazos cansados de soportar el escudo de mi corazón y que no aguantará muchos golpes más. Comprendí que hay batallas que uno no puede ganar solo y así ha sido mi vida…batallas perdidas una tras otra. Que en ocasiones tuve un apoyo que lejos del concepto de amistad, y como las estaciones ese apoyo fue cambiando hasta que acepté que era imposible, que no servía de nada estar acompañado de alguien cuando no estás enamorado y me resigné a seguir solo. Me acostumbré a la frialdad de las paredes de mi cuarto, al llanto de soledad de mi alma. Me dediqué a guardar mis problemas para poner atención a los problemas de mi entorno. Es ahora cuando después de tanta penitencia entra un rayo de luz bañado de calor a mi cuarto oscuro de mi alma.

Te vi en ocasiones lejos de mi alcance por mucho que estuvieras a mi lado y hoy te tengo como compañía en la cama, diciéndome al oído te quiero mucho. Se terminó mi agonía de quererte detrás de un cristal sin poderte tocar. Yo lo tengo claro y sé lo que siento. No pienso subirme al avión pensando que me falta dar un beso a alguien como me pasó la vez anterior. Quiero que seas tú la última cara que vea antes de subirme al avión para comenzar con nuestra separación. Incluso ahora, escribiendo, siento cerca ese momento y la tristeza me embarga de no verte allí. Me voy sin la sensación de la calidez de tus besos…y por eso quiero que estés allí, porque me haces falta. Necesitaré ver a esa persona de la que estoy enamorado…de ti Raúl.

Todo empieza a cambiar en mi vida, me siento a gusto, satisfecho de lo bien que nos va todo, de lo bien que congeniamos, de que aún mantengamos esa magia del principio. Todo está cambiando desde la última vez que estuve por aquí. Noches vividas desde que llegué, traducidas en momentos que quedan aquí grabados. Me encanta que ya se lo hayas contado a tus mejores amigos, que ya es oficial, eres tú el ángel que me custodia.

Te quiero mucho Raúl, y quiero estar contigo siempre. Acuérdate de este bobito cuando leas esto. Un beso y un abrazote enorme….

J.G.A.

No hay comentarios:

EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...

Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad




"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE