jueves, 28 de octubre de 2010

TE CONOCÍ...

Te conocí sinceramente, locamente, profundamente. Te conocí comprando el pan, bajo la lluvia, en Viena. En Bruselas, en Múnich, en aquella ciudad. Te conocí dulce, amargo, triste, alegre, aunque nunca feliz. Te conocí en la ducha, en la cocina, con tus ojos azules...desnudándote. Comiendo helado, con salsa en tu camisa, con botones sin abrochar. Te conocí con la cremallera bajada, con la sonrisa tribulada, con los dedos presos a un piano. Con la más triste de las despedidas, con prisas y a escondidas, te conocí huyendo de mí, vestido de verde, con camiseta a cuadros. Durmiendo sobre mi almohada, escondidos en tu guarida, hablando en varios idiomas. Te conocí cuando menos lo esperaba, en el lugar más apartado del mundo, en la estación más fría. Te conocía enfadado, dolido, desolado. Sabías a pistacho y olías a té con leche, a miel sobre el cuerpo, a cosquillas en los dedos. te conocí cuando todo iba mal, cuando me hacía de rogar, cuando más tenía que contar. Te conocí en silencio, con tus ojos clavados en mi cara, con la más bonita de tus miradas. Así te conocí, y seguramente volveré a conocerte cientos de veces más...

No hay comentarios:

EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...

Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad




"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE