Has tomado el camino equivocado un par de demasiadas veces,
creciendo con saltos sobre fuego y sudando sangre. Pero los de ahí arriba
todavía lo llaman vivir. Equivocaciones, caídas y patadas, ¿cómo has podido
volver a sonreír? En el fondo de tu alma es donde guardas lo que has sido y lo
leo reflejado en tus ojos. Lo que llena y lo que duele, lo que solamente tú has
visto. Una década que ha pasado tan lenta para ti, aunque a la velocidad de la luz para los demás. Supe
de dónde había salido el traje para tu último baile.
Una conversación descolocó todo objetivo cuando me contaste
que el final del todo es la muerte y que en la puerta del cielo hay alguien que
nos pregunta si hemos sido felices en vida. Jamás esperaría que tu respuesta
fuera afirmativa, pero ¿cómo pudiste serlo? Ni siquiera fue una rosa con
espinas, sino un camino infernal sin horizonte. Entonces me dijiste que yo no
estuve ahí, que no vivía bajo tu piel, que yo no tenía ni idea. “Para mí, la
felicidad son buenos momentos aunque estén teñidos de rojo, y de esos…he tenido
alguno que otro”, dijiste justo antes de marchar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...
Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad
"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"
No hay comentarios:
Publicar un comentario