jueves, 29 de mayo de 2014

AMIGRAÑANDO MI EXISTENCIA

Alguna que otra pesadilla creada con fantasmas del pasado, malos recuerdos atascados e infidelidades que infectaron los tonos azules de mi confianza. Así, cuando intento dormir no puedo, y cuando lo hago se vuelve todo negro para despertar entre sudores amigrañados con un saber estar que se me pierde por los poros de mi almohada, que ya no ahoga llantos por andar tan mojada. Con miedo a terminar por miedo a no volver a tener un comienzo en mi nuevo lugar. Los sueños se quedaron ajenos, tan solo para emprendedores y valientes como yo en alguna ocasión solía serlo. Culparé a la tormenta que conocí cuando tenía 5 años, a la arena que me hundía un poco más mis zapatos o a la lluvia que mojaba mis mejores harapos. Yo, mientras tanto me limitaré a buscar colores en la sal del mar, en los rayos del cristal, en las puertas agrietadas de algún olvidado desván. Espero no llegar tarde para que no me vaya tan mal esta vez. Se necesita tiempo para volver a ser alguien importante cogiendo riendas que se rasgaron en alguna batalla del pasado, de esas que han marcado el dolor atenuado de mis espaldas. El viento, como siempre, me impulsará a un nuevo acantilado y ahí será mi "basta", que me impulse a querer volver a olvidar, que hoy, una vez más...se me antoja inaudito, como todo lo que se me pasa por la cabeza al pensar. 

lunes, 26 de mayo de 2014

MIGHT...

Y es a veces que deseo desaparecer y no puedo, que deseo que el tiempo vuelva hacia atrás y no puedo, ni tampoco puedo simular no haber conocido a alguien o dejar mi mente en blanco cuando me apetece. No puedo reprimir lágrimas ni evitar decepciones. Tampoco puedo perder la compostura de la forma que quiero ni convertirme en alguien estable y cuerdo. No se dejar de ser visceral o emocional, ni cuándo comencé a serlo. Tampoco puedo huir como si nada hubiera pasado o no responder a un teléfono. No puedo pensar que soy maravilloso o único, ni que todo vuelva a ser como antes. 
Son tantas las cosas que aunque quiera no puedo ser....que finalmente me he acostumbrado a sentarme en las esquinas de la habitación a romper a llorar hasta que mi cabeza se cansa de pensar y cae rendida a una nueva locura...y así, señoras y señores...pasan mis días. 

domingo, 25 de mayo de 2014

DESCOLORIDO Y DESHILACHADO

Los relojes, agujas que me agobian al girar sin descanso, sin volver atrás...al punto en el que dejamos de encontrarnos. La fe, que crece y se difumina a partes iguales, que me hace seguir mientras lloro a lo largo del camino. La injusticia de preguntar al viento por qué siempre soy yo el que se rompe por dentro, se cose a sí mismo y se vuelve a deshilachar. Así paso los días...vagando por calles con hilos que cuelgan. La multitud, lejos de ayudarme, me ata mis colgajos a una tablilla de madera y juega con mi vida cual marioneta. Me hago valiente e intento tomar las riendas de mi destino, el que ya parece estar escrito y me lleva por un acantilado oscuro, tenebroso. En lo profundo del barranco creo verlos a ellos, a todos los que perdieron el rumbo en medio del camino. Héroes que flaquearon sin descanso hasta que un cuerpo humano no pudo soportar la presión. Almas, sin embargo, eternamente infinitas, como las ganas que hoy tengo de verte, de contarte, de decirte qué fue de aquel hombrecito que se hizo mayor entre llantos. Esa persona en la que llegué a convertirme a la fuerza, porque me empujaron, cuando mis ansias de volar quedaron truncadas por tu rapto. Ahí, fue justo ese preciso momento que entendí que quizás, si quizás un ser humano consiguiera volar...podría llegar al lugar donde estarás. ¿Una estrella? ¿Toda una constelación quizás? Me daba igual, yo empecé a tejer, aprendí a unir los hilitos colgantes de forma minuciosa, lenta pero segura. Con la fiel esperanza de elaborar unas alas tan grandes y ligeras como nunca nadie hubiera podido crear. Lamentablemente a mitad de la labor me di cuenta que necesitaba nuevos hilos, que solamente vendrían tras heridas y sufrimiento. Tras calvarios y martirio podría volverme a coser para quizás seguir tejiendo mis alas y llegar muy alto al volar. Hoy, una década después, dos lustros, diez años, sigo sin completar mi misión. Mis alas siguen sin estar listar para volar, y ya me duele la espalda de cargarla. Me cuesta caminar, avanzar al lugar donde empieza mi vuelo, donde emprenderé el salto que me lleve tan lejos...en dirección al sol. Seguiré a pesar de todo porque la fe es lo último que se pierde y si este cuerpo ya no me es suficiente...me reencarnaré una vez más en otro más fuerte que me ayude a volverte a encontrar...mi estrella Polar. 

jueves, 22 de mayo de 2014

UN HURACÁN...

Un huracán dentro de un solar abandonado en el que la magia ya no tiene ningún poder. Un truco de fantasía se convirtió en un planchazo de realidad. Como un puñado de arena en los ojos, o una cama de agujas que sustituyen resortes. Dos pares de ojos que ya se niegan a jugar a encontrarse entre la multitud. Alrededor...no menos de tres mil botellas rotas entre jeringuillas agotadas de matar. Ambas gargantas se rompen de tanto alcohol, con voces roncas que no cuentan todo lo que pasó. Aquel lugar, el único testigo fiel. 
Aquel terreno vuelve a convertirse en un simple hogar de habitación a no compartir. Cama en la que solamente descansa el cuerpo; alma y mente vuelan sin rumbo con los dientes de león. Queda atrás cualquier verdad con aquel barrio en una zona residencial, donde todos se marchan, pero nadie dice a dónde va. Los ecos hacen vibrar las neuronas que ya no saben si decir lo que el cerebro se atreve a pensar. El valiente es el sudor que no para de emanar. No hay público ni multitud, solamente unos vecinos que no saben quién se esconde en tanta oscuridad.
No es lo más sencillo acabar sin saber si alguna vez se llegó a empezar. Ambos se retiran al reino de las tinieblas. Toman sus caminos que llevan al purgatorio de la leyenda y escuchan voces que retumban en sus oídos y provienen de la nada eterna. Ambos se preguntan si existe alguien que los quiere, en alguna otra dimensión, en algún que otro contenedor donde los recuerdos se pierden y los olores se disuelven en la mente. Un huracán dentro de un solar abandonado en la magia que ya no tiene ningún poder...

EL MUNDO GAY

Es de repente tras más de siete años de haber salido del armario que me encuentro rodeado de prototipos con los que no me siento para nada identificado. Vivo en la ciudad más homosexual del país y estoy rodeado de gays que viven por y para una aplicación de móvil que les dice qué gay es el que está geográficamente más cerca y dispuesto a tener sexo sin pudor. Apenas tres frases bastan para que estas dos personas se encuentren y jueguen a la ruleta rusa de las enfermedades de transmisión sexual. Todo decorado con imágenes de miembros o traseros, de cuerpos fibrados y de desvergüenza sin límites al exponerse de forma tan explícita para que una ciudad de millones de habitantes sepa que tenemos menos amor propio que intimidad.
En las discotecas madrileñas, al menos a las que he ido (que no son pocas) me encuentro con un percal digno de pintar en un lienzo en 3D. Todos los homosexuales que bailan "su propia canción" son muy diferentes, pero la gran mayoría con un único objetivo: no acabar solo la noche. Para ello se disfrazan con ropas de colores imposibles, varias tallas más pequeñas que la suya propia, con diseños a cual más hortera y si se puede enseñar el máximo de carne pues mejor. Las más femeninas bailan insinuantes el ritual de la serpiente regalando plumas allá donde van y otros prefieren jugar a ser masculinos y pasarse cinco horas moviéndose dentro de la misma baldosa. Miradas de radar que visualizan absolutamente todo para analizar hasta qué nivel podrán optar esa noche. Si la noche no acaba de forma exitosa no habrá problema porque para eso están las saunas o "afters" de los cuales hablaré después.
La música que escucha gran parte del colectivo gay va desde cantantes con voces vergonzosas como Madonna, a grupos de modernas tipo Love of a Lesbian o La Casa Azul. No olvidemos clásicos como Britney Spears, Kylie Minogue, Fangoria, Rihanna, Beyonce, Paulina Rubio, Thalia..etc. Muchas de ellas tienen en común que o no escriben sus letras, o no saben cantar, o no tocan ningún instrumento. Algunas cumplen todos los requisitos. A esto le sumamos una base "dance" o "electrónica", un puñado de pastillas o unos "polvitos" que esnifar y se completa la noche ideal gay de muchos personajes nocturnos madrileños. 
Si no se ha logrado el objetivo deseado en la discoteca siempre habrá saunas para ir a las 7 de la mañana y practicar todo tipo de actividades sexuales con cualquier hombre que allí se encuentre y en el que el olor 
"humanidad" y sudor será lo único que guíe a las personas dentro de esa oscuridad. Ahí intercambiarán fluidos hasta que más de uno (que probablemente ni lo sepa) contagiará a algún otro con diferentes tipos de enfermedades de transmisión sexual, que las hay y muy diferentes. Y luego, como siempre...guardarán el orgullo, saber estar y la vergüenza que no tuvieron y volverán a casa para sufrir la resaca del domingo (o del lunes, o del martes). 
Otra opción son los afters, solo aptos para cuerpos resistentes a drogas y más drogas que acabarán sin acordarse de absolutamente nada de lo que ha ocurrido y se despertarán en una cama ajena de algún hombre aprovechado que "Dios" sabrá lo que ha pasado en esa habitación. Madrid tiene un gran abanico de oferta gay que es bastante variada, amplia y degenerada. Yo, personalmente, no me siento identificado con el tema de sexo con cualquiera y donde sea, drogas para mejorar la noche o borrachera sin límite para perder la vergüenza. A pesar de lo que muchos podrán pensar, por aquí se mueve mucha enfermedad de transmisión sexual, mucho gay que la tiene sin saberlo y muchos otros que contagian a sabiendas de las consecuencias. De aquí a 20-30 años no quiero pensar en el alcance de toda esta epidemia si no se encuentra cura o si no se regula o se toma precaución cada vez que se practica sexo con extraños. 
EL gran evento del año es "El Orgullo", que cada año llena las calles de Madrid con miles y miles de personas. Aquí se hacen desfiles, cabalgatas, carrozas y se llena la ciudad de siete colores, purpurinas y maquillajes. Los homosexuales se convierten en maricones y salen a la calle más femeninos que nunca, más apretados que nunca y enseñando más cuerpo que nunca (si cabe). Aquí se "reivindican" los derechos de los gays, se luce el amor homosexual más que nunca y la vergüenza vuelve a quedarse en casa a descansar. No me parece mal que se haya creado este evento para reivindicar los derechos de los homosexuales, pero esto es de lejos lo que se hace en esta semana. No soy partidario de ir por ahí aireando ni mi condición sexual, ni mi vida privada, ni paseando por la ciudad como mono de feria para ver qué hombre está más bueno y puedo acabar con él por la noche. Se ha perdido mucho la esencia de este evento y aunque es cierto que no solamente homosexuales acuden a esta cita (curiosos, turistas, gente gayfriendly...) sí que es cierto que denigra el papel de los homosexuales en la sociedad. Es cierto que no debería importarnos lo que piense el mundo de los gays, pero tampoco es la forma de ganarnos el respeto que a muchos nos ha costado conseguir. Si tenemos la fama de promiscuos, enfermos y depravados...yo, que vivo en la misma sociedad, me muevo en el mismo mundo, y conozco un sinfín de historias, confirmo que es cierto. Esa etiqueta es muy difícil de quitar y mucho más si se degenera tanto en este tipo de eventos. Hay que ser un poco más serios y se puede disfrutar de muchas otras formas que saliendo a la calle medio desnudo y vestido de un híbrido entre hombre y mujer para que tengamos nuestro polvo del día. 





sábado, 3 de mayo de 2014

EL OLVIDO

A veces te conviertes en tripolar, en alguien que no conoces, que te cambia por dentro y que apenas puedes impedir dejar salir. Es tan confuso que no puedes saber si eres tú, un alter ego o un personaje que solamente vive en tu mente. La circunstancias externas te llevan a situaciones límites, a pensamientos de lo más oscuros, a sensaciones desagradables que no han de desearse para nadie. Se mueve...el camino del futuro apenas se ve en el horizonte y parece que las arenas movedizas te hunden sin dejarte avanzar. Aquel teléfono que deja de sonar, apenas existes porque ya casi nadie piensa en ti y te conviertes en polvos del recuerdo de algunas mentes que solían valorarte. Lo material se transforma en supervivencia, levantarse toda una proeza y luchar con armas rotas un reto aun por lograr. Pruebas que van marcando el camino y a su vez tu espalda, con latigazos de destino, de rumbos mal cogidos, de caminos sin salida. La deriva se convierte en el día a día y tu única coartada son excusas para ocultar la realidad. Apenas te deja respirar y te planteas si estás loco de verdad, si lo que piensas es sensato o lógico y rompes a llorar. Vuelves a jugar a eso en lo que nadie te gana, porque hacer de tripas corazón ya lo llevas bajo la piel. Luchas contra las corrientes, las mareas, las enormes enumeraciones de todas esas cosas que quieres hacer y no podrás. El tiempo no te deja, tu miserable existencia no te lo permite y tu orgullo sigue siendo aquella filosofía infernal. Te cansas de esperar algo que no llega, dejas de ser tú para ser un reflejo de lo que alguna vez pudiste ser. Pasas fronteras que juraste no cruzar y cuando quieres gritar para pedir ayuda es cuando todos están de espaldas ensimismados en sus felices andaduras donde ya no hay hueco para ti. Y el teléfono sigue sin sonar, y se hace más y más complejo respirar. Los ojos escuecen, la voz se enmudece, los oídos se cierran y estás entumecido hasta las trancas. Tu defensa se convierte en herir a los que te rodean y los ataques solamente son contra tu persona, la cual se convierte en tu enemigo número uno, porque no hay nada más malo que vivir rodeado de soledad, de silencio, de los taladros que provocan los ecos del vacío, que ya conoces muy bien. Nadie te escucha, nadie te mira, pero no puedes desaparecer. Ahí, en ese punto intermedio entre la fuente de la vida y el infierno de la muerte es donde te encuentras, en el recoveco más inhóspito que te puedes imaginar...sumido en el más cruel de los pecados...el olvido. 

EL COMIENZO NUNCA RESIDE SOBRE NINGÚN PRINCIPIO...

Parecía que nunca nacería, pero aquí está...con una estética forzada y protocolaria. Con un toque propio de esos que te recuerdan a quién pertenece y con muchas expectativas de futuro (para liberar tensiones más que nada). Sin más, pongamos puntos y suspensivos a esto que nace hoy y que nadie sabe hasta dónde llegará....bienvenidos a mi verdad




"LA LOCURA QUIZÁ NO SEA OTRA COSA QUE LA SABIDURÍA MISMA QUE, CANSADA DE SOPORTAR LAS INJUSTICIAS DEL MUNDO, HA TOMADO LA INTELIGENTE RESOLUCIÓN DE VOLVERSE LOCA"

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE

TODO OBJETO VARÍA SEGÚN LA VISIÓN DEL QUE LO CONTEMPLE